Dialogamos con José Luis Stella, climatólogo del Servicio Meteorológico Nacional, sobre el cambio en el ciclo Niño/Niña y las perspectivas climáticas para los meses por venir.
El Seguro en Acción (ESEA): ¿Qué está pasando con el clima en Argentina?
José Luis Stella (JLS): Venimos de varios años con la Niña, la triple Niña, 3 años, que nos afectó mucho por la sequía. Incluso todavía hay regiones que no se están recuperando. Podemos decir que el ciclo Niña terminó en marzo/abril. Pero actualmente todavía se ven zonas afectadas por la falta de lluvias como es toda la zona central del país, como Córdoba, Santa Fe y Oeste de la Provincia de Buenos Aires. También hay que recordar que atravesamos un verano histórico en cuanto a las altas temperaturas que se registraron. Calor y sequía fue una combinación fatal. Argentina viene muy impactada por este clima extremo.
Y cuando se está yendo el fenómeno Niña, irrumpe el Niño. Lo bueno hubiera sido transitar un año de normalidad entre estos ciclos, para que la atmósfera se acomode. Pero no, el Niño comenzó a desarrollarse rápidamente durante el otoño/invierno. Las lluvias comenzaron a impactar fuerte en la zona cordillerana. Este invierno fue muy lluvioso y con abundante nieve, por encima de lo normal, en la cordillera patagónica y zona central.
Por otro lado, la zona central que es la que más necesitaba agua, no se vio favorecida por las lluvias durante el invierno y comienzo de la primavera. La zona que sí se recuperó muy bien es el norte del Litoral.
ESEA: ¿Cuáles son las perspectivas para lo que resta del año?
JLS: Siguiendo con la señal del Niño, esperamos tener un trimestre (octubre, noviembre y diciembre) más lluvioso en el litoral, sobre todo en el norte de esa región. Por el contrario, en el Noroeste se esperan lluvias por debajo de lo normal. En el resto del país esperamos un comportamiento más normal. En la zona central del país se espera que las lluvias se vayan normalizando. En Cuyo y la Pampa, vemos que las lluvias se normalizarán para fin de año. Algunas zonas irán recuperándose de la sequía de a poco. Pero ningún modelo está viendo abundante lluvia en la zona núcleo en el corto plazo (octubre 2023). Esta situación se debería ir revirtiendo a medida que transcurra la primavera.
ESEA: ¿Qué diferencia hay entre el Niño y la Niña?
JLS: El Niño es la fase positiva de este fenómeno, que se llama “El Niño oscilación del Sur”. La fase positiva es el calentamiento de las aguas del océano pacífico que en nuestro país tiene correlación con mayores lluvias. La Niña es el fenómeno inverso, un enfriamiento del agua que reduce las precipitaciones, y tiende a llover menos en la zona núcleo. Este cambio Niño/Niña se presenta con mayor intensidad en nuestra región.
ESEA: ¿El cambio climático incide en el fenómeno Niño/Niña?
JLS: Este es un fenómeno de variabilidad climática natural. El cambio climático no incide en su frecuencia. El cambio climático no evita esta ocurrencia.
El cambio climático sí puede afectar en el impacto de estos ciclos. El cambio climático puede incidir en el mayor o menor impacto del fenómeno. Un ejemplo es la sequía del último verano. Como dije, hubo un ciclo de 3 años de Niña y un aumento de las temperaturas. Veranos cada vez más cálidos, con temperaturas récord. Un verano que duró hasta marzo. En este caso, el impacto de La Niña se vio exacerbado por el calentamiento global.
ESEA: ¿Y cómo viene el verano?
JLS: En el verano será crucial la intensidad del fenómeno. Las provincias del noreste de Argentina deberían esperar mayores precipitaciones. El Niño podría presentarse fuerte e impactar más en esas zonas. Habrá que estar atentos a la intensidad del fenómeno en el verano e inicios del otoño.